Todas sabemos lo que cuesta mantener una manicura uniforme. Ya no solo por lo difícil que resulta conservar las uñas largas, sino porque a menudo, éstas no crecen lo suficiente, no crecen de forma homogénea o se debilitan o rompen antes de lo que quisieras.
A continuación, nombraremos algunos hábitos que debes adoptar si quieres disfrutar de uñas más largas y cuidadas:
1. Cuida tu alimentación
Seguramente sea el hábito más importante de todos el de alimentarse correctamente, el cual puede afectar no solo a la salud de tus uñas, sino también al de tu aspecto, a tu cabello, a tu energía…
Si no te alimentas adecuadamente, tus uñas se volverán frágiles, y unas uñas frágiles solo tienden a quebrarse y a crecer de forma dispar.
Por ello, recuerda que los alimentos que benefician al buen crecimiento de las uñas son aquellos que contienen proteína, ácidos grasos y calcio. El hierro y la Vitamina A y B también harán que éstas estén más sanas y fuertes.
Por otra parte, el consumo de alcohol o tabaco no benefician en absoluto al fortalecimiento de las uñas. ¡Somos lo que comemos…y bebemos!
2. Mima tus uñas
Productos naturales como el aceite de oliva dan propiedades a las uñas, además de dejarlas hidratadas. También puedes mimar tus manos y uñas con un automasaje usando crema hidratante, antes de hacerte la manicura.
De igual modo, intenta evitar productos de mala calidad que puedan dañar tus uñas o volverlas amarillentas.
3. Aplica endurecedor de uñas:
Se trata del esmalte transparente que usamos normalmente para aplicar una última capa sobre el esmalte de color. Así consigues matar dos pájaros de un tiro; que tu manicura dure mucho más tiempo y que tus uñas se vuelvan más gruesas y con menos tendencia a romperse.
4. Protege tus uñas
Quizás tengas hábitos cotidianos que hacen que tus uñas se vuelvan frágiles y no te das cuenta. Nos referimos, por ejemplo, a usar productos de limpieza sin guantes o a lavar con agua caliente, la cuál reblandece las uñas de forma considerable, volviéndolas frágiles y facilitando que se rompan o quiebren.
Usar guantes evitará además que tu manicura se caiga en “un plis plas” o que tus uñas se llenen de suciedad.
5. ¡Prohibido comerse las uñas!
Ni que decir tiene que comerse las uñas es uno de los peores hábitos que pueden hacer que tus uñas se vuelvan quebradizas y no consigas verlas crecer con normalidad.
Si eres de las que ven romperse sus uñas continuamente y nunca consigues verlas crecer como quisieras, te animamos a que apliques por un tiempo estos 5 hábitos para evitar que se rompan las uñas .